1-INTRODUCCIÓN Y PLANTEAMIENTO Gracias por haberme invitado a compartir con vosotras, para mi es siempre un placer , un disfrute poder acercarme a la espiritualidad que os ha engendrado, la espiritualidad de espiritualidad de Foucauld y el subrayado que hace de algunos aspectos de la espiritualidad cristiana y que vosotros identificáis en siete claves : · Amor apasionado por Dios · Hacerse pequeño para hacerse hermano · Evangelio y Eucaristía · Hermano universal · Gritar el Evangelio con la vida · La fe en el Señor de lo imposible · Contemplativos en el corazón del mundo que Dios ama En este encuentro, nos con-voca una búsqueda, una pregunta que pide ser aterrizada, y encarnada cada vez más en nuestras existencias concretas y nuestros entornos: ¿Qué significado tiene en nuestro mundo y en nuestra Iglesia ser hermanos y hermanas universales? ¿Y qué significa esto en un contexto de globalización, de crisis de redistribución de la riqueza, que no de insuficiencia de recursos, como nos quieren hacer creer y una crisis además tan tremendamente desigual en sus consecuencias? ¿Qué significa ser hermano y hermana universal en un contexto de flujos migratorios imparables pese a las leyes inhumanas que los criminalizan y pretenden extinguir violentando aun más el sistema que los genera? Nos hacemos esta pregunta en un tiempo propicio el tiempo litúrgico del Adviento. Un tiempo que nos recuerda el ya si, pero todavía no del reino y la necesidad de estar expectantes, vigilantes, activamente en espera, vigías de las huellas de la encarnación de Dios en el mundo , para identificarle como el Nuevamente encarnado (EE 109), El que se ha hecho ultimo para que detrás de él no haya mas últimos y desde los últimos se nos ofrece en universalidad para hacerse accesible a la humanidad toda. Un tiempo para DESPERTAR, para abandonar somnolencias y embotamientos (Luc 21,25-28.34-36) y liberar la sensibilidad cautiva que sólo capta y descubre aquello que le teledirigen desde un mando a distancia y que aprisiona la verdad con la injusticia (Rom 1,18). Pero la verdad cristiana no es otra que un Dios personal que en su sobreabundancia amorosa y relacional se ha hecho carne, historia, humanidad, pobre, pueblo, y al que en consecuencia nada humano ni mundano en su hondura les es ajeno, porque es su profundidad misma (Hec 17,28).Un Dios que se hace último para dársenos a todos y que desde ellos se nos ofrece en universalidad. Un Dios que no suple, ni ataja nada, sino que pide nuestra colaboración para que le echemos una mano en su sueño de humanizar en plenitud la vida, un sueño de humanización universal , pero una universalidad que es concreta, histórica, se hace cultura, gesto , palabra cotidiana entre los mas próximos y próximas. El Adviento nos recuerda que la creación y la humanidad le somos tan preciados a Dios que se ha hecho uno de nosotros para poder hablarnos con una misma gramática, para descubrirnos que lo más plenamente humano es lo mas plenamente divino y que fracturar la humanidad y su dignidad intrínseca es fracturar a Dios mismo (Mat 25)y y esta fractura nos rompe y hiere a la humanidad toda. Sin embargo la cultura dominante de la que participamos en Occidente “desprecia la vida y adora las cosas”, por eso Europa más que erguida camina cabizbaja a la vez que convulsivamente trata de llenar su insatisfacción crónica. Estamos, dice Jon Sobrino ante una”especie de existencial inmunizante contra el sufrimiento de las víctimas”[1].El panorama resulta en gran parte desconcertante y desolador : “Nos hemos quedado sin grandes relatos, pero con pequeños presentes, sin pensamiento fuerte, pero con caja fuerte, sin saberes globales pero con intereses particulares, sin afán de construir un mundo nuevo, pero con afán de construirnos una vivienda adosada en una zona residencial privada. El imperio de lo efímero y la necesidad de lo superfluo están siendo el mejor caldo de cultivo para una nueva forma de fascismo mundial que se construye sobre las vidas de los terceros y cuartos mundos .La guerra se ha convertido en el nuevo nombre de la paz, la libertad en el nuevo nombre de la esclavitud y la ignorancia en la fuerza”[2] Pero el adviento nos recuerda que la liberación está cerca a (Luc 21,28),que en la densidad de nuestro momento histórico se detectan también chispas, de luz, pequeñas luciérnagas que insinúan el camino, son las chispas de la encarnación de Dios en nuestro mundo. Cuando la oscuridad es mayor, dice Gustavo Gutiérrez[3], un fósforo encendido, una chispa, una luciérnaga tiene un alcance inusitado y levanta nuestras esperanzas. Por instantes nos permiten vernos las caras, saber quienes estamos ahí, percibir rostros menos temerosos, miradas que invitan al dialogo y la colaboración son las pequeñas pero contagiosas luces que alumbran una espesa noche. Somos invitados e invitadas a ser mujeres, hombres y comunidades luciérnagas que anuncien con su vida que el otro no es un enemigo, sino que el otro, y el más radicalmente otro que es el más empobrecido es un hermano, es carne de nuestra carne y templo de Dios.
2.ALGUNOS LUGARES Y REALIDADES DONDE SE FRACTURA LA FRATERNIDAD Y LA DIGNIDAD HUMANA: En parte mi reflexión va a seguir el último informe de Caritas[4] sobre la crisis, aunque intentaré no centrarlo sólo en cuestiones economicistas pues la pobreza como sabemos no es solo un asunto de renta ni de ingresos sino también de autoconcepto, de reconocimiento de la dignidad , de participación , de relaciones de asimetría y falta de reciprocidad, de carencia de redes sociales, en definitiva de sentirse necesario o no, “válido” o no , en la construcción del espacio social y no un mero destinatario de la ayuda de un benefactor o un “sobrante”. Con esta aclaración hecha paso a enumerar algunas situaciones, los colectivos y los rostros humanos que hay tras ellos que según Caritas española están siendo más golpeados por la crisis y algunas constataciones que emergen de esta situación: 2.1.la primera constatación básica es que La crisis económica está haciendo emerger nuevas formas de pobreza desde un doble movimiento: a) Por un lado, “nuevos excluidos”, es decir, personas que estaban en situación de precariedad o de vulnerabilidad social, y están pasando a la realidad de la exclusión , con lo que esto supone de un triple desgarro o ruptura : -Un desgarro Social, que podríamos denominar “vulnerabilidad vital”, porque se refiere a las rupturas de vínculos relacionales, familiares, en el ambiente, etc , que presentan los sujetos y que tiene que ver muchas veces con los cambios en las estructuras familiares y la movilidad social. La fragmentación de los vínculos sociales lleva a las personas que los sufren a una fuerte crisis de pertenencia que interiorizan como auto-exclusión -Un desgarro económico: que alude sobre todo a la carencia de recursos imprescindibles para la supervivencia: renta, empleo, vivienda, escasez de recursos básicos, etc . -Un desgarro vital : que alude a la dimensión personal de los sujetos, y que se puede denominar también como “ precariedad cultural”, es decir, precariedad de los significados vitales : comunicación , sentido de la vida, erosión de los dinamismos de la persona ( identidad, confianza en uno mismo,reciprocidad )o dicho más coloquialmente “ por no tener se termina creyendo que no se es“. La experiencia de invisibilidad, aislamiento y marginación termina por hacerse autoconcepto . b) Por otro, “excluidos reincidentes”: personas que con mucho esfuerzo dejaron de ser excluidos para ser precarios o precarias, e incluso explotados, pero dentro del circuito socio-económico y que se están viendo con la crisis nuevamente golpeados por la exclusión, fundamentalmente por aspectos relacionados con la vivienda, el desempleo y el recorte de los servicios sociales. 2.2. La segunda constatación es que la crisis está teniendo un efecto de RECESION, de RETROCESO, incluso en el modo de entender las políticas sociales pues hay todo un movimiento de vuelta al asistencialismo, incluso por parte de los sectores más progresistas (roperos, operaciones kilo, bancos de alimentos…). Se están liberando partidas económicas para ello y no para otras iniciativas centradas en la implicación de los colectivos afectados, en su protagonismo y activación (Ejemplo Rita Barbera), esta sirviendo más de contención del sistema, que de problematización del mismo, en términos generales está suponiendo mas resignación y miedo que una politización crítica del conflicto y creatividad en la búsqueda de alternativas, aunque también existen, pero de formas muy minoritarias.
2.3. Los grupos de población más afectados por la crisis están siendo: 2.3.1. LAS MUJERES. No olvidemos que pese a la puesta en marcha del Plan de igualdad y de un Plan integral contra la violencia las mujeres somos el colectivo que más violencia e injusticia sufrimos. Esto no quiere decir que no haya varones en estas situaciones pero cualitativamente nuestra situación es de mayor explotación y discriminación La pobreza de las mujeres esta relacionada con la desigualdad de oportunidades para acceder a un empleo, formación , lugares de toma de decisiones , plena participación en el espacio social, acceso a los que nos vemos privadas todavía fundamentalmente por nuestra condición de mujeres y la identificación con lo privado y los roles de cuidado Por eso desde una perspectiva de género el problema no es si hay más o menos mujeres pobres que hombres o si su tasa de pobreza crece más deprisa o no, sino que lo interesante es analizar la diferente pobreza que sufren las mujeres y la relación entre femenina y la dependencia económica, ya que las mujeres se empobrecen por problemas muchas veces derivados de su dependencia afectiva-económica: · Natalidad (madres solteras). · Rupturas afectivas (separación, abandono, viudedad) · Problemas sociales que afectan a relaciones afectivas (hospitalización, encarcelamiento de sus parejas) · Por pérdida del trabajo del marido o compañero. · Por la mayor intensidad de las situaciones de pobreza que padecen las mujeres (perciben menos protección social y menos recursos para combatir la pobreza)
Lo que resulta en todo caso un hecho es que de los más de 60 millones de pobres que existen en la Unión Europea, la mayoría son mujeres, y de los 20 millones de parados de larga duración, el 60 % de ellos son desempleadas y que su crecimiento es alarmante. Las mujeres además seguimos en teniendo trabajos peor pagados que los varones, somos el sujeto mayoritario de la economía sumergida (“recomendación de la CEE a España de acabar con el mercado negro del trabajo doméstico ) y nuestra integridad física esta más amenazada como lo reflejan las muertes y los maltratos de las mujeres a manos de parejas o sus ex compañeros. Urge una transformación profunda en las relaciones de género para cambiar la situación de pobreza y violencia sobre las mujeres. Urge una reeducación de lo que es ser persona-varón y persona-mujer más allá de los estereotipos dominantes que nos permita liberarnos de la esclavitud del patriarcado. Ser hermano y hermana universal pasa también por ello, como pasó por Jesús y su modo de ser un varón liberado del patriarcado que rompió con un orden jerárquico relacional y se situó con las mujeres y los varones en circularidad y a pie de reciprocidad . La pobreza sobre las mujeres golpea especialmente a las mujeres solas con cargas familiares, generalmente no compartidas (familias monoparentales), que no pueden asumir todos los gastos familiares y que tienen problemas de conciliación entre vida familiar y laboral. Otras tasas de pobreza femenina elevada la presentan; Las mujeres inmigrantes, que han llegado a España por reagrupación familiar y cuyo permiso de residencias les hace depender de sus maridos, y que están teniendo grandes problemas para encontrar trabajo sobre todos las musulmanas, especialmente las que llevan “pañuelo”) Las mujeres mayores de 40 años que buscan trabajo por primera vez (generalmente porque el sustentador principal ha quedado en paro) sobre todo como empleadas de hogar y atención a personas mayores. Dentro del empleo doméstico merecen mención a parte las trabajadoras internas. La mayoría extranjeras sin papeles, que en el caso de algunos colectivos están sometidas a una sobre-explotación y regímenes de casi esclavitud y están siendo puestas en la calle sin ningún preaviso, ni finiquito, etc, amenazadas además con ser denunciadas como ilegales. La vulneración de sus derechos es terrible en estos momentos y eso les está llevando a muchas de ellas a organizarse , por lo que se está activando en nuestro país la lucha por los derechos de las trabajadoras domesticas y lo están protagonizando las migrantes, especialmente latinas. 2.3.2- Un segundo colectivo son las familias y entre ellas destacamos: FAMILIAS JÓVENES (20 a 40 años de edad) con niños pequeños (lo que conlleva el aumento de la infancia en extrema vulnerabilidad). FAMILIAS CON CABEZA DE FAMILIA VARÓN EN PARO (mayor de 40 años), con hipoteca, o créditos personales a los que no pueden hacer frente. Dada la precariedad de sus condiciones laborales, no han tenido recursos para ahorrar. Cuando no existen apoyos familiares, agotan las prestaciones por desempleo o trabajaban en sectores de economía sumergida, acuden a los servicios sociales a solicitar ayuda económica para satisfacer necesidades básicas. 2.3.3- Un tercer colectivo son los PARADOS procedentes de empleos de baja cualificación, o insuficientemente cualificados, con experiencia laboral en los sectores de la construcción, la hostelería y, más recientemente, de los sectores industriales. Muchos de ellos son inmigrantes que tenían autorización de trabajo. Empiezan a agotarse las prestaciones por desempleo y entran en situación de “ingreso cero” en los hogares. También trabajadores y trabajadoras de edad avanzada que han sido despedidos/as. Y también trabajadores/as autónomos/as de pequeños comercios o talleres que han tenido que cerrar a causa de la crisis. 2.3.4. Un cuarto colectivo : PERSONAS MAYORES afectadas por la crisis en la medida en que ven agravadas sus responsabilidades familiares (hijos en paro/respuesta a hipotecas que han avalado…), y que no pueden con los gastos a partir de su pensión. 2.3.5- LOS Y LAS INMIGRANTES. Están siendo el chivo expiatorio de la crisis.Incluso mediáticamente se pretende mostrar a la sociedad española que su retorno sería la solución a la crisis , cuando esto no es mas que una medida engañosa y populista claramente insolidaria con aquellos que han sido sobre quienes se ha construido parte nuestra pujanza en décadas anteriores. Los inmigrantes se están viendo especialmente afectados por la crisis, entre otras razones porque la destrucción de empleo ha sido más acentuada en sectores como la construcción y el sector servicios, que tradicionalmente han estado ocupados por ellos. En relación las PERSONAS INMIGRANTES EN SITUACIÓN REGULAR, se detecta un amplio colectivo ya muy arraigado, con un amplio periodo como residentes, pero que, ante la falta de trabajo, no pueden renovar los permisos. La crisis está afectando a familias que estaban asentadas desde hacía años y que han visto cómo la pérdida del trabajo no les permite poder cubrir sus necesidades básicas e incluso ven que puede peligrar su situación administrativa. Su reacción ante la crisis está transitada por desmotivación, miedo a proponer alternativas por considerarse ciudadanos/as de segunda, escasa capacidad de negociación ante situaciones de impagos o renegociación de deudas. Un hecho que agrava la situación de las personas inmigrantes que se encuentran sin empleo es la ausencia de red de apoyo social y/o familiar lo cual determina a menudo su puerta de acceso a la exclusión, incluso en situaciones en las que han participado activamente en el espacio económico y laboral de la sociedad de acogida. Por otra parte, la situación de los inmigrantes “sinpapeles” se ha recrudecido notablemente con la modificación de la ley de extranjería, especialmente en lo que se refiere a la criminalización de su situación y su ingreso en los CIES y la penalización de la hospitalidad ( empadronamientos, etc ) . Las contradicciones se están agudizando de tal manera que la respuesta ciudadana frente a los CIES se empieza a visibilizar con más fuerza en algunos sectores de la sociedad española así como la organización de los sin papeles en defensa de sus derechos humanos (campañas contra la despenalización del top manta, etc ) 2.3.6.. Se está dando también un incremento de personas que acuden a los recursos de personas sin hogar, aunque aun no se les puede considerar propiamente en esta situación, sino mas bien personas que acuden a ellos en circunstancias puntuales al no disponer de otras alternativas. Las personas sin hogar siguen caracterizándose por ser mayoritariamente varones (90,5%), con un mayor número de autóctonos (72%) frente a los inmigrantes (28%), y una edad media cercana a los 40 años 2.3.7. También se detecta un aumento del empobrecimiento en la población gitana, por la caída de la chatarra o la mayor presencia del otros colectivos (chinos en el textil, por ejemplo) en actividades laborales como la venta ambulante. 2.3.8. Algunos agujeros negros de la exclusión como son las cárceles, o el trabajo sexual se están viendo también duramente afectados por la crisis: En el caso de las cárceles: recortes de presupuestos e incremento de la población penitenciaria En el caso de las trabajadoras sexuales se “cualifica” la explotación y el régimen de esclavitud al que se ven sometidas las mujeres por las redes de trata y trafico. El componente racista se está enfatizando y ha empeorado considerablemente la calidad de vida de las mujeres trabajadoras del sexo. El último lugar lo están ocupando las mujeres africanas y los travestis.
3. ¿COMO Y EN QUE NOS RETAN LOS ROSTROS, LAS HISTORIAS DE VIDA QUE SE ENCARNAN TRAS ESTOS DATOS A VIVIR LA UNIVERSALIDAD? 3.1. El primer reto nos lo trae una invitación provocadora de los textos de la primera semana de Adviento: DESPERTAR. N0 VIVIR EMBOTADOS.AVIVAR LA SENSIBILIDAD frente a la indiferencia o naturalización del sufrimiento humano, porque todos formamos parte de la humanidad y el otro es carne de mi carne ( Is 58,8) Se trata de DESPERTAR DEL SUEÑO DE LA CRUEL INHUMANIDAD, que diría Ellacurìa. Ese sueño depredador, mas que sueño, pesadilla que enmascara hasta insensibilizarnos que en cada hombre y mujer de la tierra hay un hermano y su dignidad está por encima de cualquier otra categoría: raza, género situación socio-económica, credo religioso, orientación sexual,etc. Y que el culto preferido por Dios es la justicia, porque Justicia es uno de sus nombres más verdaderos ( Jr 33, 14-16) y su gloria no es que se llenan las iglesias o que tengamos sucesores , sino que el hombre y la mujer vivan y lo hagan en plenitud ( San Ireneo ) . El embotamiento de la sensibilidad se hace “costra” en la indiferencia como actitud vital y el individualismo auto justificado : ¿Soy yo acaso el guardián de mi hermano?(Gn 4,9) . Una de las principales armas de la indiferencia es “la abstracción”.Cuando abstraemos la realidad concreta y la reducimos sólo a ideas o principios generales las personas de carne y hueso quedan diluidas en el estereotipo o el etiquetaje social .Así la abstracción nos permite vivir justificados y sin que nos salpique el dolor ajeno y los últimos quedan reducidos a necesario ajustes del sistema, efectos colaterales o realidades peligrosas de las que nos tenemos que defender, ignorando que tras estas generalizaciones o abstracciones hay historias, rostros iguales a nosotros en anhelos y dignidad y a la vez también diferentes en su radical alteridad. No hay ningún mecanismo para romper la abstracción que no pase por la proximidad , el encuentro , la cercanía con los últimos , la vecindad y amistad con ellos , el cuerpo a cuerpo con la gente que peor lo pasa a nuestro lado, para escuchar el grito de Dios en ellos ( su denuncia) y también su ternura y el dinamismo de transformación hacia el que su realidad nos empuja ( su anuncio) . En definitiva la proximidad, la búsqueda del encuentro con los últimos, la amistad con ellos , pero no de manera “romántica” o ideal sino desde su ser de carne y hueso , y desde nuestra realidad también precaria y limitada, es donde nos jugamos la práctica del amor de Dios que para ser universal no tiene otro camino que no sea empezar por los últimos y asumiendo nuestra propia debilidad y contradicción . En esta proximidad y amistad con los últimos se nos descubre también el MISTERIO profundo de la alteridad: El otro nunca me es un idéntico, aunque confluyamos en lo humano. Dios nos ha creado a todos a imagen y semejanza pero en cada uno ha puesto un toque original, sin embargo a nosotros una de las cosas que más nos cuesta es precisamente el construir fraternidad desde las diferencias, sin pretender que los otros sean mis idénticos. 3.2. De ahí el segundo desafío: RELACIONARNOS CON LOS ÚLTIMOS DESDE LA ACOGIDA, LA ESCUCHA Y RECONOCIMIENTO Y EL RESPETO A LA PROFUNDA ALTERIDAD DEL OTRO. Reconocer al otro y a la otra en su verdad, en su diferencia. Y esto supone una actitud de escucha profunda haciéndonos conscientes de prejuicios y clishés, que incluso aunque no queramos están introyectados en nosotros fruto de nuestra cultura etnocéntrica. Se trata pues de escuchar conscientemente, abriéndonos cordialmente al otro y tratando de percibir la realidad como la percibe él para ponernos en su lugar y desde ese lugar intentar propiciar el encuentro sin dejar de ser quienes somos, asumiendo también nuestra diferencia original. Reconocer, escuchar y respetar al otro supone situarnos ante él o ella como un misterio que irrumpe en nuestra vida, una visita de Dios en su encarnación con la que quiere mostrarnos algún aspecto inédito de la realidad y de su misterio. Escuchar, dice Boff [5] es “disponerse a percibir aspectos de la realidad inaccesibles para nosotros, que no solo nos pueden ser revelados por otros … Gracias a la escucha , podemos aprender confrontarnos, incorporar , completarnos y enriquecernos en nuestra identidad, la cual nunca es algo fijo e inmutable, sino algo capaz de renovarse y crecer en contacto con el diferente” Esta actitud de respeto pasa por intentar la honestidad con lo real , situarnos ante lo real con cordialidad, desde el corazón más que desde la ideología y sin escandalizarnos de ella . Situarnos en la realidad y con la gente no desde el juicio moralizante y desde el deber ser, sino desde lo que las cosas son, porque sólo asumiendo la realidad como es en toda su complejidad, podremos intentar transformarla. Sólo se cambia aquello que se ama. Sólo si queremos a la gente y nos dejamos querer por ella podremos hacer de parteros los unos para con los otros y dar a luz unas nuevas relaciones. Sin embargo aunque los cristianos y cristianas hablamos mucho del amor, a lo que más miedo tenemos sobre todo los célibes es a los riesgos del amor concreto, porque el amor no es una idea, ni un principio, sino un dinamismo descentrador que hace del otro o de la otra el protagonista de nuestra existencia y nos desinstala de manera incomoda e imprevisible 3.3.El tercer desafío es LA HOSPITALIDAD: SER HOMBRES Y MUJERES, DE PUERTAS ABIERTAS EN UNA EUROPA FORTALEZA QUE SE LAS CIERRA A LOS DIFERENTES. Aunque la globalización nos abre a nuevas perspectivas convivenciales está suponiendo también en sus aspectos más negativos, la demonización del diferente y la ideología de la seguridad y la sospecha a cualquier precio. La acogida, la hospitalidad son hoy más que nunca un signo profético de la universalidad del amo que requieren tiempo y cuidado: calidad y apuesta gratuita por ello. Acoger es abrir el espacio y el tiempo al encuentro con otros diferentes , de los cuales un icono es la inmigración, y hacerlo desde una actitud de reconocimiento y mutua necesidad lo cual nos lleva muchas veces al esfuerzo de intentar sentir y pensar desde donde no estamos, a suspender juicios, a arriesgar en el diálogo y a aceptar lo que el otro quiera ofrecerme ,a no imponer ritmos sino a ir detectándolos. Sólo así será sea posible el encuentro. En la capacidad de acoger o no de nuestras comunidades nos jugamos muchas veces los procesos y hasta los propios dinamismos de vida dentro de ellas. Nuestros contextos están sedientos de comunidad pero a la vez la temen puesto que los valores dominantes invitan a la desagregación y al individualismo, por eso las apuestas comunitarias o grupales son tan costosas y poco duraderas pero hay que seguir invirtiendo a fondo perdido en ellos. Suscitar y cultivar el tejido comunitario no es algo pasado de moda, sino tarea prioritaria en nuestros barrios y a menudo su puerta de entrada para ello no es otra que la convocatoria por vía de la amistad, la relación y el acompañamiento con lo que esto supone de priorización en nuestras vidas y proyectos pastorales. No lo podemos todo. Es necesario elegir, seleccionar, discernir, entrar en dinámicas de un hacer más sosegado, menos abrumado y ansiosos por las tareas y que nos lleva muchas veces a estar demasiado ocupados y preocupados ,más por las cosas que por las personas y sin tiempo ni espacio psicológico ni para nosotros ni para los demás . 3.4. El cuarto desafío es AMAR POLÍTICAMENTE Y SUB-VERSIVAMENTE , es decir hasta poner boca abajo el orden establecido . La lógica burguesa ha hecho del amor un sentimentalismo, dulcificando su carga transgresora e incluso revolucionaria, y aprisionándolo en la intimidad de la vida privada o en las relaciones exclusivamente interpersonales, pero el amor tiene una dimensión totalízante e integral. Afecta al hombre y a la mujer entera, a la creación, en todas sus dimensiones. El amor vivido al modo de Jesús descentra, desinstala, problematiza, da prioridad a la necesidad del otro sobre la propia, subvierte el orden, transgrede, es creativo, sitúa como primeros a los últimos ( Mt 21,28-32) se le hace intolerable la injusticia, (Cor 13). En este sentido decimos que es político, porque se traduce en pasión y compromiso por el bien y la dignidad de todos, empezando por los últimos. La política entendida como cuidado y responsabilidad del bien común no es otra cosa que una acto de amor .Como seguidores y seguidoras de Jesús necesitamos recuperar esta dimensión del amor político para dar el salto de lo individual al coraje colectivo. El amor nos en-reda, nos urge a sumar y no restar fuerzas en la construcción de la cultura de la inclusión, en la construcción de una ciudadanía alternativa. Un ejemplo puede ser la realidad de la inmigración en la que muchos cristianos y cristianos estamos implicados, pero ¿Cómo estamos? ¿Desde que conciencia?, ¿Amortiguamos la injusticia a la estamos combatiendo? ¿Cómo nos implicamos en el derecho a tener derechos de los sin derechos?, ¿Cómo nos vamos organizando juntos contra el racismo y la xenofobia, las redadas masivas, que nueva conciencia ciudadana vamos haciendo emergen en torno a esto y como afecta también a nuestras prácticas de vida cotidianas, obediencias y desobediencias civiles, etc.? El amor político nos urge a abandonar nuestros recintos privados y hacernos visibles con otros y otras a quienes el sistema invisibiliza, hacer causa común con ellos y ellas y hacernos visibles todos, sin pretender ser el centro de la plaza, lo cual supone aceptar las ventajas e inconvenientes de la plaza pública con todas sus impurezas pero también con toda la fuerza de las sinergias. Amar políticamente nos lleva a ser mujeres y hombres que queremos estar cada vez con más hondura y calidad de presencia en la plaza pública, con otros y otras diferentes, porque allí se juegan los intereses de los últimos y la emergencia de una nueva humanidad que no puede realizarse sin ellos y ellas. La presencia en los movimientos sociales sigue siendo hoy un desafío para los cristianos si queremos ser humanos universales, los movimientos sociales acaso sean hoy para nosotros esa zarza ardiente donde el Dios liberador que nos sabe de siglas ni etiquetas nos cita para manifestársenos pidiendo nuestra complicidad para otro mundo posible [1] J Sobrino, Terremoto, terrorismo, barbarie y utopia, Madrid, 2002, p 174 [2] Gonzalez faus, Abjurar la modernidad , Barcelona 2002, p 32. [3] Gustavo Gutierrez , La densidad del presente, Lima, 2003, p 428-429 [4] Caritas española, la respuesta ante la crisis.III Informe. Primer semestre 2009, http //www.caritas.es [5] L. BOFF, Virtudes para otro mundo posible I, Santander 2006, pág. 139 |